La experiencia migratoria en el Mediterráneo: del corredor Central al Occidental

En colaboración con la Embajada italiana, ECFR Madrid organizó una sesión de trabajo y cena sobre las lecciones aprendidas de la experiencia italiana en inmigración.  

Guests

Shoshana Fine, investigadora, ECFR. 

Luca Giansanti, director general de Asuntos Políticos y director de Seguridad y Política en el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de Italia. 

Sandro Gozi, exsecretario de Estado a la Presidencia en el gobierno italiano y consejero sénior de Asuntos Europeos para el Partido Democráta de Italia. 

Bernardino León, Presidente de la Escuela Diplomática de Emiratos Árabes Unidos.

Tarek Megerisi, investigador visitante, ECFR.

Ana Palacio, abogada especializada en derecho internacional y de la Unión Europea; miembro de las Juntas de Enagás, Pharmamar y AEE Power. 

Asli Okyay, investigadora principal, Istituto Affari Internazionali. 

Chaired by

Stefano Sannino, embajador de Italia en España. 

José Ignacio Torreblanca, director de la oficina de ECFR en Madrid e investigador sénior. 

El jueves 8 de noviembre, en colaboración con la Embajada de Italia en España, ECFR Madrid organizó una sesión de trabajo y una cena posterior sobre la experiencia italiana en inmigración, observando las lecciones aprendidas desde el corredor del Mediterráneo Central al Occidental. Se abordó la situación en Libia y los participantes exploraron cómo Europa puede cooperar mejor con su vecino del sur para encontrar formas de avanzar y apoyar los esfuerzos de estabilización. Finalmente, la sesión se centró en la relación bilateral entre España e Italia: cómo estos dos países de la periferia pueden colaborar entre sí en estos temas e involucrar a otros estados miembros de la UE e instituciones en el proceso.

Tras el cierre parcial de la ruta de migración del Mediterráneo central entre Libia e Italia, España se ha convertido en el principal punto de entrada para los inmigrantes y refugiados en Europa este año, recibiendo cerca del 50 por ciento de todas las llegadas por tierra y mar. Este cambio de la ruta del Mediterráneo Central a la ruta Occidental se puede vincular en gran medida a los acuerdos alcanzados entre la UE e Italia con Libia para detener el flujo de inmigrantes. La continua inestabilidad en Libia y la creciente presión en la ruta Marruecos-España exigen una respuesta más sostenible de la UE a la inmigración y al vecindario del sur.